martes, 8 de enero de 2008

Siempre fuerte, amiga mía

De las mejores cosas que me traigo en la mochila de mi Cái, una es la sonrisa de Ana, la Skunkita.

Porque en sus ojos veo reflejados un puñao de atardeceres, y si veo su pelo rizado -su pelo Pantene, of course- lo imagino peleándose con el viento de levante. Y si escucho sus pasos dibujo miles de huellas por la arena húmeda. Y si reímos juntas me sabe como la brisa de la orilla. Y si se me empapan los ojos, es la humedad del viento del sur. Y si guardamos silencio es como si estuviésemos leyendo los posos del café de la terraza del Meliá. Y si nos encontramos a las tantas en el messenger, vuelvo al salón con vistas al mar donde tantas estrellas devoramos en pos de sueños.


Sueños, Anita. Como aquellos que fabricábamos mientras te asaba una paletilla de lechal a las dos de la mañana mientras ya se veían sobre las aguas los barquitos faenando. Como las noches de cine y palomitas o la sesión continua de sofá a sofá estrenando una superpantalla. Sueños, Ana. Como el abrazo que te debo, ahora que he perdido tanto tiempo lamiéndome las heridas que siento que olvidé decirte que mis brazos son suficientemente grandes para que quepamos las dos.

Sé -lo acabo de leer- que le pediste a los Reyes un milagrito. Yo también se lo dije al oído a mi Cristo de los Doctrinos hace poquito. Para que su sonrisa te llegue hasta la isla, para que su abrazo os llegue hasta la habitación del hospital. Para que duerma en la misma almohada de tu padre y vigile sus sueños. Para que deje los míos en lista de espera y atienda lo que de verdad es importante. Para que reconozca la valentía de quien se pelea la vida cada minuto y la gana poquito a poco como si fuese un regalo.

Y yo, Ana, sé que aunque se haga el dormido me escucha. Igual que te vio a tí tu Nazareno isleño mezclada entre la gente siguiendo su paso por las calles. Y sé que le rezo aunque no recite padresnuestros de memoria. Y sé también que parte de ese corazón que dejé a sus pies permanecerá siempre a tu lado. Y que cuando lo necesites y eches mano de él comprobaremos que sigue sabiendo a sal y a mar, a las encinas de mi tierra adentro, a las tardes de terraza y piscinita, a las piedras doradas y las fachadas de cal, a los días y las noches, a la salud y a la enfermedad. A adobo y costillitas. A la sonrisa que me traje en la mochila, que me devuelve la luz de Cái cuando estalla como una sorpresa en tu boca.

Mañana, o pasado, o cuando vayas por nuestra Gades fenicia y marinera, ponte allá donde la diosa de bronce mira hacia el mar y mira tú en dirección contraria, allá donde cada noche asoma la estrella del norte. Quizá por detrás de la cúpula de azulejos veas asomar el humo de esta fábrica que también te pertenece.

Y brindaremos por la vida, Anita. Por los que van llegando, por los que están de siempre. Por los obreros que me sostenéis esta factoría incluso en los días más duros. Por la sonrisa maravillosa de "Rafalín" entre tus brazos. Por la lucha diaria de tu padre, por la valentía de tu madre, por la mirada generosa de tus hermanas, por tus idas y venidas, por ese armario de tres puertas con corazón de una sola cerradura del que tienes la llave. Y sabrás que estoy contigo. Que en el fondo nunca me fui. Que seguimos pasándonos una pelota de colorines en el agua.

Siempre fuerte, amiga querida. Siempre fuerte.

24 comentarios:

Donce dijo...

No me gusta ser la primera en escribir, suelo esperar a que alguien arrope mis líneas, (seguramente para que no se note tanto mi falta de creatividad).
Pero hoy es distinto, primero porque, Skunky, me ha hecho mucha ilusión verte. Y segundo, y mucho más importante, pq quiero mandarte muchos ánimos. Entiendo que la guerra no está perdida, así es que SUERTE Skunky, mucha SUERTE!
(Por cierto, el niño es comestible, eh! que cosa tan linda!!).
Un beso para las 2 tocayas.

Concha Pelayo/ AICA (de la Asociación Internacional de Críticos de Arte) dijo...

Puffff!

Qué cositas nos traes, amiga Ana. No son horas de llenarse los ojos y el corazón de esas nostalgias infinitas que nos rebosan el alma.

No sé quiénes son esas personitas de la foto, muy queridas para tì, pero el hecho de que sientan por tí lo que tú sientes por ellas, ya debes darte por satisecha. Que la vida no se acaba en el batir de una ola de tu Cádiz bendito contra la arena, eso ya lo sabemos, por eso, súbete a la ola, qué digo, sé tú misma la ola y siéntete crecer por dentro mientras se estampa tu brío sobre alguien al que puedas sorprender.

Te sorprenderás a tí misma.

Besos de agua del Duero.

Kinush dijo...

No me cansaré de decir lo bien que escribes, que bonito de vedad. Óle!!
Te paso mi email: marchalorpez@hotmail.com
Muchas gracias por lo de la fotografía.
Que esta Fábrica de Sueños continúe con su bella labor y con todos sus miembros (y los nuevos que se unan) trabajando en paz y armonía, mostrando lo bueno de la vida.
un beso.

Lola dijo...

Berrendita, no sé como narices lo haces, pero fíjate que sin conocer a Skunky pues como si ya la conociera...claro! es que el humo de esta fábrica ha llegado a mi casa, cercana a la Vera-Cruz, y sí, le he hablado de las dos al Doctrinos, alli dormidito, Berrendita, y luego a ver a la Lolita, ya sabes.
Qué bien empezar así la mañana, leyendo...
Ay, berrendita mía! Ole!

selom dijo...

Hola Berrendita, llegue a tu blog por el Blog de mi amigo "El silencio de la Mirada", y debo reconocer que este post me ha emocionado, escribes genial, y me ha conmovido, espero que esta fábrica de sueños crezca cada dia con las ilusiones depositadas cada día.

Saludos!

Félix dijo...

Algunas de tus entradas me desbordan y no sé que decir. Ésta es una de ellas. Pero que sepas que te leo.
Cordialmente,
Félix

Ana Pedrero dijo...

Donce: seguro que a Skunkita le encanta tu visita. A fin de cuentas, sóis ya viejas conocidas, pero ese es nuestro secreto. UN besazo. :)

Anatema: para recordar lo bueno, siempre son horas. Me encanta tu propuesta. Intentaré ser una ola y estampanarme sobre alguien. O simplemente crecer, que ya es bastante. Otro besazo.


Kinush: en ello estamos. Y si esta fábrica se alimenta de sueño, gracias por traeros los vuestros. Y gracias, sobre todo, por hacer que vengan nuevos obreros. Un abrazo.

Lolita: te envidio por vivir cerca de mi Cristo Dormido. Pero sé que tengo una buena mensajera al lado de la capilla dorada y que cuando le susurras nuestros nombres nuestro Doctri sonríe. Por algo es el santo patrón de esta casa. Un besazo azul, azul.

La creadora: lo primero bienvenida. Gracias por venir, gracias por dejar tu huella, gracias por emocionarte y gracias por ponerte el mono de curranta de sueños que todos compartimos. Precioso nick el tuyo, por cierto. Esta noche, con más calma, te haré una visitilla. Un beso.

Félix: a veces no hace falta decir nada. A fin de cuentas, estas letras son un guiño que vuela hacia San Fernando, para recordarle a Ana toda la alegría que hemos compartido y la que nos resta, incluso en los tiempos del cólera. Un abrazo.

Y a todos, como siempre, GRACIAS.

Soñador dijo...

Ojalá nunca hubieramos tenido que leer estas lineas, repletas de amor y dolor...

Ojalá nunca hubieramos tenido que leer estas lineas, de una artista amiga de sus amigas...

Tiempos mejores llegaran a puerto, y el levante con él grandes y bellos recuerdos de tiempos pasados...

La resaca de un nuevo atardecer...será como la huella de las lágrimas que nunca debieron salir de tus ojos...

Solo deseo que llegue el dia que esboces una media sonrisilla, pensando en el pasado, en los buenos momentos, en la grandeza, en la fortuna de haber tenido tu suerte...

El tiempo no todo lo cura, pero si lo templa...Skunky...

Skunky dijo...

Berrenda...

Yo sí que estoy agradecida al cielo (o a tu Doctrinos) por tenerte entre mis manos....

Por haber saboreado junto a tí esos atardeceres, por haber compartido lo bueno y lo malo...
La alegría y el dolor...
La ilusión y la desilusión...
El miedo y el valor...
Ser cómplices de sueños rotos o de sueños que llegaron a ser realidad...

Siempre a mi lado, arracándome sonrisas y carcajadas limpias, no dejando que me hunda, secándome las lágrimas con esperanzas tardías...jejeje (lo del novio formal es para marzo de este año, no del pasado...:D)y con carros de victoria que sí fueron verdad...

Me has trasladado a esa ventana frente al mar, a esas noches de interminables conversaciones, a esas terrazas de calientes cafés, a ese sabor de boca que nos dejó "Volver", a esos platos cocinados con cariño (eres mi mejor clienta...) a esas bromas de vacile en la misma habitación... Todos mis recuerdos se han agolpado de una sóla vez.

A veces, paso por delante de esa ventana, cuando es de noche y nadie mira, cuando sólo se escucha el rumor de las olas y el viento desafiando a los cimientos de esas torres de granito frente al mar... y hasta soy capaz de escuchar nuestras risas...

Siempre fuerte, Berrenda...

PD: Donce: pues sí... tengo esa cara que me ha dado dios...jejejeje. :D Mil besos.

Donce dijo...

...y bien "resalá" que eres... pelo Pantene!!

Víctor L. Gómez dijo...

Se fuerte Skunkita,ya que algun dia -aunque no lo creas- se te recompensata.

Mucho animo guapi!

Un beso, Víctor.

Ana Pedrero dijo...

Soñador, bienvenido siempre. Precioso nick el tuyo. Espero que nunca dejes de serlo y que arropes los sueños de nuestra querida amiga. Igual tú mismi fuiste un día un sueño que se le cumplió sin darse cuenta. :)

Skunkita: cuando mires esa terracita con vistas al mar, no lo hagas con pena, sino con alegría: por todo lo que hemos compartido de puertas hacia adentro y por todo lo que está por venir, sea a orillas del mar, o sobre el embalse del Esla, o bajo el cielo azul insultante que guarda los atardeceres en Los Pelambres. El sitio es lo de menos. Además, no olvides que en esa ventana sigue habitando una estupenda persona que te quiere. Mil besos, guapa!!

Javier García Martín dijo...

Mucho ánimo Skunky. Un beso

"No estarás sola,
te saludarán a tu paso en mil idiomas, con mil lenguajes,
la gente a la que despertaste en cada viaje,
los que dormían en las calles,
a los que preguntaste,
por su esperanza, por su desastre."

luca dijo...

uy, que descubrimiento esto de los blogs. Viajando he llegado al tuyo.. Y escribes tan bien, que me da vergÜenza seguir con el mío jajaja, es que soy nueva en esto de los blogs, así que te invito al mío si quieres

Ana Pedrero dijo...

Víctor, Javito: seguro que a la Skunki le hace mucha ilusión leeros, pues aquella noche a orillas del Duero -después de pasar por El Perdigón y aquel friki baile con pasodoble y pérdida de zapatito incluído- inventándonos poesías al alimón fue inolvidable. Lástima que Pascual desertase.

Luca: bienvenida siempre. La verdad es que alucino con la gente nueva que está viniendo a la fábrica. Y me encanta. Hay monos para todos, porque hay sueños para todos. Y venimos a compartirlos, no?. Un beso y suerte en la blogosfera. Aquí nos tienes para lo que mandes. :)

estrella de mar dijo...

El potaje de la comida salió rico, el viaje fue largo y cansado... pero lo importante es lleguar (porque llegué) y estar aquí. Y disfrutarlo.

Aunque muy de vez en cuando los erasmus también tenemos que hacer como que estudiamos... y yo voy a ello.

Un abrazo!

Guarismo dijo...

Da gusto pasear por esta fábrica que rebosa cariño a raudales, que es un remanso de paz en este mundo y años que nos toca vivir, que transmite sueños deliciosos, que te transporta, como por ensueño, a un mundo distinto, ¿idílico?

Da gusto leer lo que Berrendita nos regala; y los comentarios... todos envueltos en ese espíritu que este cuaderno de bitácora contagia...

Cada vez más comentarios, cada vez mas soñadores nuevos, ¿te extraña, Berrendita? Y muchos más que vendrán.

¿Sabéis? Esta fábrica engancha (sí, supongo que ya lo sabéis). Yo, cuando tengo un mal día, sueño con acceder a esta productora de sueños. Y cuando accedo y leo, mi alma se calma, me evado de las penas del día, disfruto... hasta me animo... y me muero de envidia de cómo escribe la Berrendita. No sé cómo lo hace, no sólo es su estilo ni su exquisito y salao vocabulario, es algo más: es que llega muy adentro lo que escribe. Te recomendaba, Ana, no hace mucho, que publiques lo que tienes escrito... no dejes de hacerlo.

Skunky, lo importante ahora es que tus deseos se cumplan y que el Cristo al que le reza Berrendita escuche vuestras plegarias... ¡Ojalá! Me uno a ellas. ¡Ánimo!

Suerte tienes, Skunky, paisana cañailla (yo también nací en La Isla) de que Ana te escriba así... (¿o es envidia?)

Un abrazo.

Ana Pedrero dijo...

Gracias, Miguel. Unas gracias que saben a manteca colorá, porque cuando te leo se me suben los colores.
En serio; cuando me decís cosas así, me dejáis sin palabras. Pero ayudáis a cimentar los sueños y a fabricarlos cada día.

Gracias a todos. :)

Duke dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Duke dijo...

Ser fuerte es amar a alguien en silencio...y poder sonreir...
Ser fuerte es irradiar felicidad cuando se es infeliz...
Ser fuerte es mantenerse en calma en momentos de desesperación...
Ser fuerte es demostrar alegría cuando no se siente...
Ser fuerte es sonreír cuando se desea llorar...
Ser fuerte es hacer a alguien feliz cuando se tiene el corazón hecho pedazos...
Ser fuerte es callar cuando lo ideal sería gritar a todos su angustia...
Ser fuerte es elogiar cuando se desea maldecir...
Ser fuerte es tener fe en aquello que no se cree...

Por eso, por más difícil que tu vida pueda parecer estoy segura de que ya eres fuerte o sino solo por lo que habla Berren de ti,lo conseguirás...

Un besito!!


P.D:Ana enhorabuena ^^(espero no meter la pata) :D

Concha Pelayo/ AICA (de la Asociación Internacional de Críticos de Arte) dijo...

Ana, me adhiero al último comentarista. Ser fuerte es sonreir como lo haces tú aunque te arañen los cristales por dentro.

Tienes unos amigos incondicionales. De eso no hay duda. Te quieren y te admiran, ¿qué más se puede pedir?

A veces, estoy contigo en casi todo, es como si nos retorcieran las entrañas, como si nos chuparan la última gota de sangre y, encima, no se disculpan. Y eso duele bastante.

En fin, mi Berrendita, queda con Dios.

Ana Pedrero dijo...

Pues para mí que sí, Davi. No sé a qué te refieres, pero no hay nada por lo que debas darme la enhorabuena. Sólo por esta fábrica, que también es tuya. Que es vuestra desde siempre.

Mil besos, dukesita rosquillera.

Ana Pedrero dijo...

Gracias, Concha. Por venir, por quedarte, por estar ahí, por recibirme de nuevo en nuestra Zamora, por ese sueño en papel que estamos fabricando...
Bueno, tú ya sabes de lo que hablo.

Mil besos.

Kinush dijo...

Berrendita me ha gustado mucho tu comentario en mi blog y de rollazo nada eh!! veras yo también como me he enrrollao, pero el tema que hemos hablado me apasiona.
Muchas gracias y me alegro de poder hablar con alguien de esta bella música, pues aqui en mi pueblo lo tengo crudo mi única esperanza es una amiga que estudia música antigua en Alemania y viene poco por aqui. a ver!pero ahora ya puedo hablar contigo de estas maravillas musicales.
un fuerte abrazoooo