Queridas Majestades:
Permitidme ser osada y escribiros una carta desde una fábrica sin sueños. Aprendí desde niña a esperaros con el corazón en vilo la noche del cinco de enero. Y ahora que soy mayor, sigo siendo súbdita de vuestra estrella. Y ahora que he crecido, sóis los únicos monarcas a quienes rindo pleitesía en la noche mágica que dura vuestro reinado.
No os escribí nada porque pensé que nada quería en vuestra visita de este año. Una pizca de salud, si cabe aún en la saca, y seguir en pie para plantarle cara a la vida que me toque vivir. Pero he caído en la cuenta de que, sin poner zapatito relimpio en el balcón, estaré esta noche con el alma pegada a los oídos, por si escucho cascos de camellos bureando por el tejado de mi casa y deja de darme miedo la soledad de cada noche.
Y si no habéis olvidado dónde está mi habitación, dejadme unos cuantos sueños para todos los obreros de esta fábrica. Y el don de la sonrisa, para seguir alumbrando mi camino y el de los que quiero. Dejadme también la capacidad de volver a ser niña al menos en esta noche, para poder jurar mañana que ví un rastro de luz saliendo del salón mientras en la bandeja de los dulces no quedaban más que miguitas.
Dejadme la mirada limpia de entonces, cuando no me importaba si Baltasar desteñía al darte un beso, porque era el más negro de los reyes negros y sigo jurándole lealtad. Y los ojos como platos al despertar, la fe inquebrantable en que vuestra magia bien vale todos mis deseos.
Dadme valentía para seguir cantando cada mañana, esperanza para mirar de frente al dolor, generosidad para no guardarme nada, serenidad para aceptar mis errores y paciencia para asumirlos como parte mía sin castigarme por ello. Dejad también tinta invisible para seguir escribiendo nuevos días en la piel. Poned al lado una pizca de alegría para lo que venga, ternura para quien me la pida y la capacidad de perdonar a quienes quise y no me quisieron, igual que quisiera perdonarme por no estar a la altura de quienes me quisieron mientras yo miraba para otro lado.
A aquellos que fueron parte de esta fábrica y se fueron marchando sin rescisión de contrato, dejadles al pie de la cama parte de la alegría que trajeron un día multiplicada.
Y si esta carta no os llegase a tiempo, cabalgad cuando queráis sobre el tejado de esta fábrica sin puertas y dejad deslizar los sueños por la chimenea. Aquí siempre os esperamos. En esta patria de nombre compuesto y folios en blanco siempre habita vuestro reino, siempre somos niños con los balcones abiertos.
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28 comentarios:
Pues que esta noche, bajo el árbol o el belén, te dejen todo eso junto al amor de los tuyos y el cariño de todos.
Un fuerte abrazo.
Mi Rey Mago preferido fue siempre Gaspar, porque Melchor me parecía muy viejo y Baltasar ¡desteñía!. Ese "Rey que desteñía" me ha llegado al alma.
Un beso.
Pero que bien escribes!! espero que los Reyes Magos te traigan tooodo lo que deseas.
un cordial saludo desde el sur.
Gracias, Concherito, Manolo y Kinush. Lo que pido es también para vosotros. Para los que sóis obreros de esta fábrica y para quienes lo fueron algún día.
Mi amigo Faus me acaba de enviar por mail un post que no ha sido capaz de publicar, pero me ha encantado: primero, por saber que entra de puntillas; segundo, porque es de él. Lo copio y lo pego, para que quede constancia:
"Todo tiene un principio y un final, porque todo lo que empieza es susceptible de acabar. Unas veces duele pero siempre deberíamos pensar en que lo que no puede ser es porque no estaba hecho para nosotros, o sencillamente, nos hemos equivocado.
Quédate con lo bueno, y PALANTE!
Aquella noche de fresa y risas en Madrí fue estupenda. Espero que podamos repetirla pronto. Está en el debe, igual que una visita a Zamora. Besos para usté y recuerdos a su compañera Marigel. Zocho os está esperando". ;-)
Pues muchos besos, Faus. Pata p'alante y a fajarnos. Creo que ya sé quiénes sois mis Reyes Magos. :)
Queridos Magos:
He leído la carta que os dirige la jefa de la fábrica de sueños y no puedo menos que expresar mi admiración... y envidia (sana) por lo que os pide (y por cómo lo escribe). Ella os lo pide y a ella se lo daréis, seguro, que cuando era niño me enseñaron que Vuestras Majestades siempre traen lo que se os pide. Le traeréis esa alegría y ese cariño para la fábrica de sueños, y la valentía, la esperanza, la generosidad, la serenidad,la paciencia, la ternura, el perdón y los sueños que os pide para ella.
Y yo os pido que le traigáis también un buen año que compense ese año que dice que no vivió, pero que dejó reflejado con maestría en su fábrica. (Y, puestos a pedir, Majestades, si me permitís, que ese buen año nos alcance a todos los que de vez en cuando visitamos esta fábrica de sueños y soñemos, soñemos con la ilusión de los niños que todos fuimos en vuestra mágica noche de Reyes).
Querido guarismo: Los sueños ya se los he pedido yo para todos, que esta fábrica no tiene jefes, ni sirenas, ni salarios. Lo demás, no lo quiero para mí. Es todo para compartir.
Un abrazo, y gracias por lo que pides para mí, para todos nosotros.
Ya siento los primeros ruidos: son cascos de camellos, seguro. Son los Magos. Son tus sueños, que han vuelto por donde solían...
Las 3.
pssshhh, que nadie haga ruidoo...
...que ya estoy yo en vela para que no se olviden de nosotros...
pshhhh...dormid tranquilosss!!
Claro que si!! yo también, con tu permiso, voy a enlazar en mi blog esta gran fábrica de sueños. Y como te digo en mi blog a ver si entre todos hacemos que la escultura policroma sea valorada como se merece, tanto la castellana, como la andaluza, la del levante...toooda, pues son autenticos tesoros por descubrir.
Saludoss
Antes de nada, kinush: la escultura policromada es una de mis pequeñas grandes pasiones, así que la comparto contigo.
Esto sí que es una carta, Berrendita, o más bien dejar tu alma impresa aquí en la fábrica para que como ahora y con el regalo del Rey Melchor, el libro "Un mundo sin Fin" de Ken Follett, pues que algo se me ha removido por dentro al leer tu carta.
Gracias por poner la guinda a esta mañana de Epifanía. Un beso.
Mi rey preferido fué siempre Baltasar. Sentía por el rey negrito mucha ternura y por eso yo siempre le pedía a él mi regalo mas especial, el mas deseado.
Hoy le pediría tantas cosas...
Ana, te deseo que los reyes te traigan toda le felicidad que necesites y mas, que eso nunca está de mas.
Besos.
Lucano: no hay prisa. Ya volverán... :)
Donce: gracias por quedarte alerta. Ya me contarás que dejaron en tu ventana.
kinush: es un placer hacer nuevos amigos con inquietudes para compartir. Algún día contaré que tu blog fue una especie de regalo de Reyes.
Lola: gracias a tí siempre, por venir. A veces me sacáis los colores, cuando decís que el humo de esta fábrica os llega tan dentro. No esperamos a Semana Santa ni de coña, eh?. Buena lectura, guapa.
Juan Carlos: sí que te has dado prisa en volver, jajaja. Pues claro que traerán felicidad. De hecho, verte por aquí bien vale una sonrisa.
Gracias a todos!!!.
p.d. Los Reyes me han traído un uñero en el pulgar de la mano derecha. Lo mismo mañana no puedo tocar la pandereta en la reunión de folcloristas que tenemos. Pero no me quejo, eh? que el año pasado por estas fechas trajeron una neumonía, jajaja. Vamos mejorando... ¿lo veis? sólo es cuestión de fé... :)
Leí lo que me recomendaste, y este último post. Voy a ser asiduo a la lectura de tu blog.
Sabía que me pondrías un nombre raro, pero... ¿el chico de los tres blogs? je je je, ese fue bueno, aunque te faltó la web... no pasa nada, agradezco el enlace.
Bienvenido con todos los honores, Roberto. Tienes razón con lo de la página web (¡¡cómo se me han podido olvidar las fiestas de Fuentesaúco, por Dios, con los ratos tan alucinantes que esta berrenda ha pasado por sus calles!!).
Pero, bueno, en cada uno de tus tres blogs está el enlace a la "wé". Así que, nada, pónte el mono, y a fabricar sueños, a ver si entre todos subimos con alegría la cuesta de enero.
Un abrazo.
Los Reyes conmigo han sido bastante buenos... se ve que se me echa de menos.
El vinito pa Semana Santa, entonces. A ver si puedo pillarme un vuelo baratito y venirme justo para las elecciones (esperemos que para celebar).
Mientras, hoy me queda ir de casa en casa despidiendome de la familia, porque las amigas toresanas se han ido ya para sus respectivos lugares de estudio...
Un abrazo y ya te leo cuando vuelva a Italia...
Qué pasó con el comentario que te dejé?
Pues eso digo yo, jajaja. Acabo de entrar en la fábrica, y no había nada. Lo mismo me lo enviaste mal. Aún así, encantada de que vengas a verme. No hace falta que te lo diga, querida Concha: estás en tu casa.
Un besazo.
"Y a tí, 2007: QUE TE VAYAN DANDO POR EL MISMÍSIMO CULO."
Lo he copiado de uno de tus textos porque no tiene desperdicio. Es la mejor manera de despedirse de algo que nos ha resultado rematadamente pésimo.
Pues eso.
Te decía, mi querida Ana, al entrar en tu blog por vez primera que me encantó tu fácil prosa y tus difícil y rebelde corazón.
Te decía muchas cosas más que, evidentemente, no me acuerdo ahora. No sé qué coño hice después de escribirlo y no lo publiqué, tal vez porque me distrajo el teléfono o no sé por qué.
Eres como una coraza de acero, aparentemente, llena de merengue en su interior que, al mínimo soplo te derrites. Así eres y así serás. Y no cambies.
Beso.
En portugués también: Beijo.
Qué blog más original!!...me ha encantado su presentación "Existe una fábrica de sueños. Yo la conozco, pero NO os voy a desvelar dónde se encuentra, no siendo que los míos se escapen por la ventana."...es una invitación a la imaginación y origianlidad.
He conocido tu blog, Berrendita, gracias a Lola y su blog "Preguntas y Flores" que tiene el detalle de enlazar algunos blogs.
Lo de las rosquillas también muy original...me pasaré de vez en cuando a hacer alguna visita a este blog (con tu permiso).
Ric
Muchas gracias, Ricardo, por tu visita a esta fábrica que desde ya, si tú quieres, también es la tuya. Aquí no se necesitan cartas de recomendación, pero si vienes desde las preguntas y flores de Lola, pues mejor aún. ;)
Pasaré a hacerte una visita por el tuyo y así promocionaremos el cine entre los salamoranos y allegados. Ya mismo te enlazo, que tengo el armario lleno de monos para los obreros que hacen posible esta fábrica, incluso allá donde yo no llego.
Un abrazo.
p.d. Estrellita, buen viaje, guapa. Espero que pronto nos cuentes cómo te va todo por Lecce y que brindemos juntas en marzo. Y, puestos a pedir, que sea para celebrar. :)
p.d.2. Y a tí, Concha, nada que no te haya dicho y que no sepas. Beijo.
Joder!!!!
He llegao tarde.... :S
Yo? todavía estoy esperando a SSMM Los Reyes Magos... a ver si me traen un milagrito...
....
Skunkita, tú nunca llegas tarde. De hecho, los Reyes te están trayendo un regalito. Cuando veas humo, asómate a la fábrica, que habrá un sueño para tí.
Te quiero.
Es cierto. Yo he visto esta tarde el humo y, en ese mismo instante, los Magos estaban dejándome un regalo. Lo disfrutaré!
Cordialmente,
Félix
Félix, te aseguro que los reyes acaban de hacérmelo a mí. Ya te echábamos de menos.
Un abrazo.
Saludos.
Este año fui paje de Baltasar (y desteñía, cómo no) y entregué tus peticiones a sus majestades.
Te serán concedidas en los próximos días, semanas, meses... como premio a tu constancia y a esa fábrica de sueños que permite a otros seguir soñando cada noche.
P.D.: Como soy "el chico de los tres blogs", agradecería que su majestad (es decir, tú) redireccionase ese enlace que tenemos a medias hacia mi perfil, y no sólo a uno de los blogs.
Seguimos blogueando.
Pues ya está hecho. A mandar...
Un abrazo. ;)
No te pongas triste Norita, no siempre después de un invierno malo hay una mala primavera y si estás buscando una lágrima en la arena acuerdate que siempre habrá un Bean contigo.
Muchos besos, ciudate preciosa.
Olé mi Norito!!. Eres un soldadito marinero disfrazado de Bean. Saber que entras, que lees, que estás, me dibuja una inmensa sonrisa en el rostro.
Te quiero, noro. Muchísimo, añado.
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